Los guantes de portero son la principal herramienta de los porteros de fútbol. Ya hemos visto en otras ocasiones como cuidar los guantes de portero para alargarles la vida útil, pero hoy vamos a centrarnos en saber cómo lavarlos para conseguir limpiarlos, que no pierdan agarre y se mantengan en perfecto estado más tiempo.
No es recomendable lavarlos muy a menudo, pero tampoco es bueno guardarlos sucios ni con restos de tierra o polvo ya que podría secarse el látex con el paso del tiempo. Una correcta limpieza puede prolongar la vida de los guantes del guardameta, hay algunos limpiadores especiales para guantes, pero también pueden lavarse con jabón neutro.
Si lavas los guantes antes de cada partido podrás tener un mayor agarre, pero tienes que tener en cuenta el tiempo de secado natural de los guantes para que no se queden con exceso de agua, ya que podría perjudicarte. Sí que mejora el agarre, que los guantes tengan cierta humedad, pero no pueden estar mojados en exceso ya que se creará el efecto contrario.
Para lavar los guantes de portero, puedes seguir los siguientes pasos:
- Llena un recipiente con agua tibia, 1/3 de agua fría + 2/3 de agua caliente.
- Introduce un guante en el agua durante unos 10 segundos para que se humedezca y sácalo del agua. Si el guante tiene restos de tierra o barro puede que requiera de un poco más de tiempo a remojo o incluso un cambio de agua.
- Frota con una barra de jabón neutro o jabón especial para guantes, dedo a dedo del guante sin presionar y centrándote en las zonas más sucias. Introduce el guante o la parte ya limpiada con jabón de nuevo en el agua para ir quitándole restos de suciedad y jabón hasta que esté del todo limpio. Repite lo mismo con el otro guante y cambia el agua las veces que haga falta para que esté limpia durante todo el proceso.
- Quita el exceso de agua empapando con una toalla sin frotar. Puedes colocar el guante dentro de una toalla y presionar ligeramente con las manos para exprimir el agua que puedan tener dentro.
- Deja secar los guantes de forma natural en un lugar fresco y seco, lejos de cualquier estufa o foco de calor directo y lejos de los rayos directos del sol.
A la hora de guardar los guantes de portero, es recomendable guardarlos en fundas separadas o en una funda donde tengan una separación y no estén en contacto las palmas de los dos guantes. También hay que proteger el dedo pulgar y evitar su contacto con la palma colocándole un papel o protección. Si el látex se queda en contacto con otra parte de látex durante mucho tiempo puede sufrir daños irreparables.
Para tener los guantes en perfecto estado tienes que tener en cuenta algunas advertencias importantes como no meterlos en la lavadora ni secadora, no exprimirlos, no colgarlos en un tendedero con pinzas, no ponerlos sobre una estufa o radiador, no usar jabón líquido ni detergentes agresivos y no usar secadores ni exponer al sol directamente.
Si los lavas con cuidado y precaución y sigues estos consejos para lavar los guantes, conseguirás unos mejores resultados de eficacia y durabilidad. ¡No se te escapará ningún balón!
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